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Alsino - Pedro Prado

Cuando nos introducimos en la faceta literaria e intelectual chilena, siempre es grato encontrarse con grandes sorpresas creativas e importantes autores que aportaron, cada uno, con un sin fin de obras y que ahora conforman el abanico de posibilidades literarias al cual tenemos alcance para disfrutar y empaparnos del torrente creativo presente en el transcurso de la historia del país.

En la contemporaneidad hallamos diversas manifestaciones artísticas y culturales, las cuales ya poseen diferentes influencias de otras regiones del mundo intelectual o de variados movimientos vanguardistas o ideológicos. Sin embargo en Chile, se potencia lo que en Latinoamérica crece cada vez con más fuerza, y es la presencia de lo local, poniendo sobre mesa tradiciones y actitudes populares.

En 1920 el autor chileno Pedro Prado publica una de sus mejores novelas, Alsino, la historia del niño con alas, quien revoluciona algunos pueblos del sur del país con su canto, su belleza, su extraño origen, y su relación con la naturaleza.
A continuación revisaremos las particularidades de Alsino, analizándolo desde el punto de vista de la naturaleza y como ésta es la base de funcionamiento del desarrollo de la obra.

Alsino, es un niño pobre, campesino, quien vive con su abuela hierbatera y su hermano Poli. De origen muy humilde, hijo de padres conflictivos, borrachos, sin mayores oportunidades de surgir y dar mejor vida a toda su familia, todo lo contrario, Alsino vivía en una especie de casa, más parecido a una improvisada pieza que servía como hogar. Sin embargo nuestro personaje es presentado como aquel pre adolescente que demuestra ciertas inquietudes bastantes curiosas en su estilo de vida, mientras su hermano Poli es un típico chiquillo campesino que no presenta mayores aspiraciones de vida si no más bien solo se presenta como un niño travieso, Alsino ya en el segundo capítulo nos revela su más deseado sueño: volar. Volar como un pájaro libre sin ataduras y sin un pasado con el cual cargar.

“cuando a ti te engendraron, ellos estaban en el comienzo de esa mala vida y quizás todavía tuvieran fuerzas de vergüenza. … tú heredaste su tristeza y los deseos de salir y de cambiar. ¿no andas tu Alsino, queriendo ser como los pájaros? ¡ pobre niño; bebiste en la mala leche de tu madre las visiones de sus borracheras!” (Pág 20)


Lo anterior mencionado nos muestra una secuencia clara dentro de la estructura de la obra la cual se va desarrollando y complementando con los siguientes hechos que van marcando el crecimiento de Alsino. Gran ventaja es haber heredado los conocimientos en hierbas de su abuela, o también ser un gran observador del vuelo de las aves y también haber tenido una sensible afinidad con la naturaleza que lo rodeaba durante su niñez.
El vuelo de las aves era su meta a lograr, igualarse a ellas y liberarse del lugar que lo tenía oprimido y que solo en intensos sueños podía lograr


“- Anoche, otra vez, Poli, soñé.
- volaste soñando.
- Pero volé. Volé sobre la casa y el lago. Y era tan fácil, que yo me decía: mañana, cuando despierte, no me olvidaré de todo lo que debo hacer para volar. ” (pág 11)

Volar es una acción que trae consigo un cierto grado de idealismo, de libertad, características que solo son comprendidas en el contexto de la obra completa y que si pensamos en otras obras donde aparece la imagen del vuelo, nos remite entonces a ese deseo de alcanzar metas, de enfrentar un gran desafío, y no importa el desenlace, el objetivo es alcanzar lo más alto, hecho que nos provoca inevitablemente pensar en un legendario Ícaro y adentrarnos en la corriente más lírica de la creación, pero en necesario hacer hincapié que solo a través del lenguaje lírico se puede alcanzar la perfección para dar cuenta de la belleza que significa describir la naturaleza en su más puro estado.

La influencia del lenguaje lírico es notable, nuestro personaje canta y lo hace a la belleza de las cosas, a los elementos de la naturaleza y motivado por la presencia de un persistente murmullo que lo acompaña sin saber Alsino porqué, en toda una primera etapa, la cual refleja el proceso de auto conocimiento y desarrollo hacia la madurez y la aceptación de su transformación.

El murmullo es el llamado, es el diálogo que desea entablar la naturaleza con él, quien curiosamente su origen podría ser perfectamente clasificado como sobre humano y natural. No por nada la imagen de la caída desde el árbol al intentar volar y luego la aparición de una pequeña joroba nos hace reflexionar y buscar un significado que nos conecte con el estado natural más puro de su origen.

La joroba que con el transcurso de la novela se va haciendo más grande y luego va adoptando ciertos movimientos que logran revelar que algo es lo que contiene, nos remite la clara imagen de un huevo… de un ave que nace de un huevo y la recurrente escena del huevo quebrándose de apoco para que el pajarito saque sus alas. Es ver claramente la imagen de Alsino cuando va creciendo su joroba para luego liberar sus alas y mostrarlas y ocuparlas para llevar a cabo su deseo de libertad.


“cuando la abuela y Poli lo creen dormido y salen y cierran la puerta, Alsino lleva sus manos a la espalda y, bajo el paño caliente y húmedo, por sobre las hojas de huingán adheridas a su piel, se lleva largo rato, dificultosamente, palpando su espalda hinchada y dolorida.” (pág 27)



Esta novela dividida en 5 partes se nos presenta con características poéticas que elevan su condición de una obra literaria común, a una que llega a rayar las fronteras de los himnos y las odas. No es casualidad encontrarnos con capítulos completos dedicados a la descripción de elementos naturales o a paisajes o fenómenos de la naturaleza. El autor nos involucra y nos empuja a reconocer en nuestro entrono algunos de los matices presentados en sus arduas descripciones. Se hace notable el tratamiento que le aplica a cada una de las caracterizaciones que provoca adoptar por ejemplo a las hojas, a las hierbas, al viento, el sol, el amanecer, los colores que tiene el día, los olores, las texturas, etc, como elementos vivos.


“extensos, suaves y aterciopelados lomajes, cubiertos de hierbas y flores efímeras que las lluvias del invierno hicieron nacer. Un dulce sol en mañana húmeda de primavera; sol nuevo, claro y tibio, de luz que vibra como el lejano sonido de trompetas resplandecientes. Brisas de altura, aires livianos, puros y vastos, que sí guardan y al besar dejan el salino sabor y los libres sueños del océano que acaban de cruzar.” (pág 83)

Las descripciones juegan un rol fundamental en el desarrollo de Alsino, y la voz narrativa se presenta en consonancia con lo fantástico que luego se hace maravilloso. Como el narrador es heterodiegético, el conocimiento se comparte y el relato es llevado por la voz narradora, por Alsino y luego incluso por voces de hierbas, hojas, viento, etc. se establece una tensión entre la representación poética de lo real y la representación propiamente criollista, porque tampoco debemos olvidar que, aunque muy lírica es la novela, también la representación de pequeños pueblos y sus respectivos habitantes, más la presencia de diversos personajes característicos de la localidad chilena, priman en la obra paralelamente con lo natural.

Personajes tradicionales, características del campo chileno, los típicos borrachitos, un pueblo ignorante que cree los primeros rumores que aparecen, un pueblo sorprendido con los avances de la modernidad, y curiosamente no reaccionan con igual sorpresa al ver a un joven con alas…, latifundistas, capatáces, abuso de poder y aprovechamiento. Esto último no puede quedar más claro que con nuestro personaje Alsino, quien es abusado política, social, económica y divinamente incluso. La realidad pudo más que nuestro personaje incluso en el plano amoroso Alsino no puede concretar sus expectativas, porque cuando realmente sintió amor, la sociedad, los estatus y las clases pesaban tan fuertemente que ni su parte más pegada a lo natural pudo derribar los estigmas sociales.


Nuestro Alsino representa infinidades de cosas, desde un niño con deseos de trascendencia, hasta un monstruo o un ángel o un ser casi violento o divino o un objeto rentable, etc. En todo el relato jamás es considerado como otro, es decir, jamás fue tratado por su entorno como otra persona, a lo mejor especial, pero otro que está compartiendo el mismo espacio.

Al ser Alsino una novela de formación, tenemos el privilegio como lectores de acompañar al personaje en su crecimiento y sus experiencias. El chico va paulatinamente alejándose de su niñez, va pasando a una adolescencia marcada por el desarrollo de sus alas y la adaptación en una sociedad para él extraña y lejana, pero de la cual el cree formar parte.

Es en este último punto en donde debemos detenernos, ya que Alsino se conforma como un ser dual, por una parte un ser natural, con alas, con el don de comunicarse con la naturaleza. Y por otro lado su humanidad, la cual lo retiene en su forma más obvia, las piernas, su cuerpo, su aspecto que si bien es bello, desnudo, perfecto, lo mantiene dentro de la categoría humana concebida por los lugareños de las localidades del sur de Chile y en donde sufre las malas intenciones de los personajes con quien va compartiendo.

Su lado natural lo inclina hacia la superioridad, le entrega las armas para trascender y lograr verse por sobre sus condiciones, sin embargo su lado humano lo tira hacia abajo, hacia lo terrenal y con él cometen los más feos crímenes y se revelan las versiones más crudas del comportamiento humano; Alsino termina sufriendo los ataques gratuitos de quienes lo ven como fenómeno, como un peligro para los lugareños y los animales, como ladrón o como un objeto de negocios.

Sufre por amor ya que en ése plano de la vida él se siente como un hombre que siente al igual que los demás. Luego sufre los ataques de una mujer caprichosa. Por otro lado sufre también pero por lo peor que pudiera pasarle, le han cortado las alas, así tal cual lo hacía el viejo domador de tordos con sus aves, lo han limitado y solo puede exhibir lo que queda de él sin poder mostrar su vuelo.


“para mayor seguridad, a Alsino, con la tijera que tusan los caballos, Evaristo, el guardián, le ha despuntado las alas.
- vamos a ver, gallinita loba… - le dijo. Y estuvo después bromeando con tanta alegría que se retiró…
De algunos de los gruesos cañones de las plumas de Alsino, salen lentas y espesas gotas de sangre. La postura forzada, y para él desesperadamente incómoda, le obliga a estar de espaldas sobre sus alas mutiladas.
Una congoja terrible lo desespera.” (pág 126)

La imagen de sus alas sangrando es tan fuerte que marca un antes y un después en la novela. La mano del hombre ha intervenido en las bondades de la naturaleza y Alsino pasa a ser la salvación – atracción de quien lo tomase detenido, Don Javier, personaje típico del campo chileno quien representa su poder latifundista con la posesión de tierras y quien ve en Alsino una opción rentable.
La realidad rural es cruda, es violenta por el afán de auto considerarse superior al resto aunque tu posición social sea inferior al de otros, siempre que exista la oportunidad de mostrarse mejor a los demás se hará.


“El dueño de casa está enfermo en cama. Los guardianes tiene así mayor libertad, y alardeando de heroicos ante las mujeres, aseguran, con mayor fuerza, entre más beben, que quisieran encontrarse con el mismísimo demonio.” (pág 120)


Alsino es usado y maltratado, sin embargo siempre quedará en el aire la pregunta de ¿porqué Alsino no hacía nada para poder escapar y liberarse de los tormentos que le proporcionaban en todas las etapas de su vida y con las diferentes personas que conoció? o será parte de la trama peculiar que tienen este tipo de personajes de la literatura, porque si reflexionamos un poco al respecto debemos reconocer que todos los pueblo deben contar con un personaje novelado, en éste caso un niño novelado, criatura de ficción del cual toda cultura o localidad necesita, así como necesitan a los mitos y a las leyendas para dar explicación a los fenómenos que por ignorancia o simplemente por mística no tienen explicación y en lo cual justifican sus actos.

También otra pregunta que se hace latente al momento de ver el despliegue de las alas de Alsino, es el ¿porqué no vuela lejos, hacia otros lugares del mundo?, y debe ser porque nuestro autor, Pedro Prado, en su afán por remecer el criollismo, hace que todos los hechos ocurran en las localidades rurales para mostrar la cotidianidad social y el efecto que provoca nuestro muchacho alado entre los pobladores.

Alsino desconcierta el orden de las cosas, tanto como su representación de niño, adolescente, que emprende un viaje de conocimiento y desarrollo personal, como el de un ser especial de un origen diferente e inexplicable al igual que su trascendencia, ya que no tiene una utilidad concreta. Alsino se eleva en su vuelo espiritual pero éste se ve coartado hacia el contacto con Dios o con lo divino ya que finalmente termina acercándose a los hombres, termina aterrizando, cayendo, igual que la imagen del momento de su muerte.

Cuando se creía que Alsino definitivamente se liberaba con su vuelo magistral y con sus himnos de embriaguez icárea, se eleva pero para caer y desaparecer, se descompone en pequeñas partículas que terminan flotando en la atmósfera, tal como la hermosa y pura imagen de una estrella fugaz.
Pero si precisamos en el final de la novela, cabe señalar dos aspectos importantes de interpretación. El primero corresponde al fracaso, ya que si desaparece fragmentándose es porque nada de lo que él hizo para alcanzar su sueño, habría valido la pena ya que pasar por tantas cosas, las menos felices y las más tristes y crudas, para luego poder volar y desaparecer como si nada, significa una frustración y un definitivo fracaso.
Por otro lado la libertad, ya que podemos interpretar su descomposición como el paso a otra dimensión de vida, al fin Alsino habría logrado su libertad y no necesariamente en el plano terrenal, hecho que prolonga el afán idealista que la novela nos presenta.

Finalmente y a modo de conclusión es importante destacar que Alsino representa un ser único y especial y la novela logra presentarnos su vida de manera tal que como lectores logremos compenetrarnos con su historia. Con características mucho más líricas de lo que pensamos, se logra exaltar a la naturaleza para darle la importancia que realmente tiene y nos muestra una madre tierra que acoge e intenta proteger a su hijo humano con alas que pasa lamentablemente por las manos de otros humanos que lo intervienen no solo física sino también emocional y socialmente.

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